Los microplásticos de las aguas residuales protegen los patógenos y son una amenaza para la salud
Los microplásticos podrían impedir la eficacia de los tratamientos de aguas residuales y propagar virus y bacterias patógenos a los seres humanos, según un nuevo estudio publicado el jueves.
Los resultados ponen de relieve la importancia de un tratamiento eficaz de las aguas residuales, ya que sin él éstas podrían actuar como vehículo de transferencia de patógenos asociados al plástico a la cadena alimentaria, según el estudio.
Las depuradoras de aguas residuales están diseñadas para eliminar los contaminantes, pero los microplásticos suelen persistir y pueden albergar una biopelícula microbiana pegajosa, que los expertos bautizaron como 'plastisfera', que incluye patógenos peligrosos para la salud humana.
El equipo que realizó la investigación, dirigido por Ingun Lund Witsoe, de la Universidad Noruega de Ciencias de la Vida, sumergió en aguas residuales los plásticos más comunes que se encuentran en el medio ambiente.
Algunas piezas se introdujeron en aguas residuales sin tratar y otras en aguas residuales en la fase final de procesamiento antes de ser liberadas al medio ambiente. Los investigadores hisoparon cada pieza de plástico y extendieron las muestras en placas de agar para cultivar e identificar bacterias.
"Los plásticos de las plantas de tratamiento de aguas residuales están colonizados por biopelículas microbianas, o 'plastisferas', que pueden albergar patógenos, como listeria, E. coli, Klebsiella pneumoniae y Acinetobacter spp., que persisten a través de los procesos de tratamiento", señalan los autores del estudio en un comunicado.
Pueden provocar enfermedades o infecciones graves
Estas bacterias pueden provocar enfermedades transmitidas por los alimentos o infecciones como la neumonía. "Este estudio pone de relieve el potencial de las plasticidades para contribuir a la propagación de patógenos procedentes de aguas residuales tratadas, lo que plantea retos para la salud ambiental y los esfuerzos de reutilización del agua", añadieron.
Sus hallazgos, publicados en la revista 'PLOS ONE', sugieren que las biopelículas de plastiesfera protegen a estos patógenos de los procesos estándar de tratamiento de aguas residuales "aunque su abundancia era baja", inferior al 1%, señalaron los autores.
Otro estudio publicado a principios de este año también subrayaba el potencial de las plastisferas, en este caso de agua dulce, como focos de transferencia horizontal de genes, incluidos los genes de resistencia a los antibióticos (ARG).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha calificado la resistencia a los antimicrobianos como una de las principales amenazas para la salud pública mundial. Los investigadores del estudio subrayaron la necesidad de seguir investigando e innovando para evitar que los microplásticos y los patógenos ligados a ellos vuelvan a entrar en el ecosistema.