Al menos 90 muertos en ataques israelíes en Gaza, según las autoridades sanitarias

Al menos 90 palestinos han muerto en ataques israelíes en Gaza durante la noche y el jueves, según funcionarios sanitarios locales del enclave. Al parecer, los ataques alcanzaron varias viviendas en plena noche, matando a hombres, mujeres y niños mientras dormían. Uno de los ataques de la madrugada del jueves alcanzó la casa de la familia Abu Daqa en Abasan Al-Kabira, un pueblo a las afueras de Jan Yunis, cerca de la frontera con Israel.

Estaba dentro de una zona que el Ejército israelí ordenó evacuar a principios de semana y que abarcaba la mayor parte del este de Gaza. El ataque mató al menos a 16 personas, en su mayoría mujeres y niños, según el cercano hospital Europeo, que recibió los cadáveres. Entre los fallecidos se encontraban un padre y sus siete hijos, así como los padres y el hermano de un bebé de un mes que sobrevivió junto con sus abuelos.

"Otra noche dura", dijo Hani Awad, que ayudaba a los equipos de rescate a buscar más supervivientes entre los escombros. "La casa se derrumbó sobre las cabezas de la gente". El Ejército israelí (IDF) dijo que había atacado docenas de objetivos militantes en toda Gaza, golpeando a decenas de combatientes, así como estructuras militares. Las IDF también dijeron que a última hora del miércoles "proyectiles" disparados desde Gaza habían hecho sonar sirenas de ataques aéreos en el centro de Israel.

Al parecer, se trataba del primer ataque con cohetes de este tipo desde Gaza desde que Israel puso fin al alto el fuego con un bombardeo por sorpresa del territorio a primera hora del martes. El Ejército israelí también restableció el bloqueo del norte de Gaza, incluida la ciudad de Gaza, que había mantenido durante la mayor parte de la guerra.

Advirtió a los residentes que no utilizaran la carretera principal para entrar o salir del norte y dijo que sólo se permitiría el paso al sur por la carretera costera. Sólo el martes murieron más de 400 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, cuyos funcionarios no distinguen entre civiles y combatientes en su recuento.

Avance de las tropas terrestres israelíes

Israel reanudó el martes sus intensos ataques en toda Gaza, rompiendo la frágil tregua que se mantenía desde el 19 de enero y que había facilitado la liberación de más de dos docenas de rehenes. Israel culpó de la reanudación de los combates a Hamás porque el grupo militante rechazó una nueva propuesta que se apartaba del acuerdo firmado.

El miércoles, las tropas terrestres israelíes avanzaron en Gaza por primera vez desde enero, apoderándose de parte del corredor que separa el tercio norte del territorio del sur. El anuncio sobre el paso indicó que las tropas israelíes retomarán pronto el control total de lo que se conoce como el corredor de Netzarim, que se extiende desde la frontera israelí hasta el mar Mediterráneo.

Israel, que también ha cortado el suministro de alimentos, combustible y ayuda humanitaria a los cerca de dos millones de palestinos de Gaza, ha prometido intensificar sus operaciones hasta que Hamás libere a los 59 rehenes que aún retiene. Se cree que al menos 35 de esos rehenes han muerto.

Hamás ha afirmado que sólo liberará a los rehenes restantes a cambio de un alto el fuego duradero y de la retirada total de Israel de Gaza, tal y como exige el acuerdo de alto el fuego al que llegaron tras más de un año de mediación por parte de Estados Unidos, Egipto y Qatar.

Sin final a la vista

La guerra comenzó cuando militantes dirigidos por Hamás irrumpieron en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, matando a unas 1.200 personas y tomando a 251 como rehenes. La mayoría de los rehenes han sido liberados en virtud de acuerdos de alto el fuego u otros acuerdos. Las fuerzas israelíes han rescatado a ocho rehenes vivos y recuperado los cadáveres de decenas más.

La ofensiva de represalia israelí ha matado a casi 49.000 palestinos, según el Ministerio de Sanidad de Gaza. Israel afirma que ha matado a unos 20.000 militantes, sin aportar pruebas. La guerra en su punto álgido desplazó a cerca del 90% de la población de Gaza y ha causado una vasta destrucción en todo el territorio.