Los beneficios de Toyota, salpicados por un escándalo de certificación

Toyota, el mayor fabricante de automóviles de Japón, redujo sus beneficios en el periodo julio-septiembre a menos de la mitad de los obtenidos en el mismo periodo del año anterior. El fabricante del sedán Camry y de los modelos de lujo Lexus reveló que el cese de la producción tras un escándalo de certificación y la retirada de modelos había mermado las ventas. Toyota se disculpó y suspendió la producción de una serie de modelos tras reconocer la existencia de pruebas fraudulentas generalizadas, incluido el uso de datos inadecuados o anticuados en las pruebas de choque, así como pruebas incorrectas del inflado de los airbags.

También se descubrieron pruebas fraudulentas en los fabricantes del grupo Toyota, Hino Motors y Daihatsu Motor Company. Los beneficios trimestrales hasta septiembre ascendieron a 573.700 millones de yenes (3.460 millones de euros), por debajo de los casi 1,28 billones de yenes (7.720 millones de euros) del mismo trimestre del año anterior. Los ingresos por ventas trimestrales aumentaron ligeramente hasta 11,44 billones de yenes (69.000 millones de euros) desde 11,43 billones. El año fiscal anterior, Toyota vendió más de 11 millones de vehículos en todo el mundo. Ahora, Toyota espera vender 10,85 millones de vehículos en este año fiscal hasta marzo. En el último trimestre, Toyota vendió 2,3 millones de vehículos en todo el mundo, frente a 2,4 millones de 2023.

Más inversión en recursos humanos

Los responsables de Toyota han prometido mejorar invirtiendo más en "recursos humanos y áreas de crecimiento", al tiempo que persiguen lo que el fabricante de automóviles denomina "multipistas", lo que significa que impulsarán los híbridos y las pilas de combustible, así como los vehículos eléctricos, en función de los gustos del mercado. Esta inversión en recursos humanos se extenderá a sus filiales y cadenas de suministro. La producción de vehículos se recuperará en la segunda mitad del ejercicio, según Toyota.

La producción en Japón disminuyó en su primer semestre debido a "la necesidad de abordar los problemas de certificación y de tomarnos tiempo para reexaminar nuestro entorno y cultura de fabricación", declaró a la prensa el Director Financiero, Yoichi Miyazaki. La producción de Toyota en su planta estadounidense de Indiana se detuvo temporalmente por las llamadas a revisión, pero ha vuelto a aumentar desde el mes pasado, dijo. Toyota mantuvo su previsión de beneficios para el ejercicio fiscal completo en 3,57 billones de yenes (21.100 millones de euros), por debajo de los 4,94 billones del año anterior.