Aguas curativas y ruinas romanas: Por qué visitar las fuentes termales de Argelia
Puede que Argelia figure en la lista de destinos de muchos viajeros por sus vastos desiertos y sus playas bañadas por el sol, pero también alberga cientos de espectaculares fuentes termales naturales.
El país norteafricano se ha convertido en un destino emergente de bienestar, a medida que los turistas descubren sus casi 300 fuentes termales y el floreciente sector de los balnearios. Estas instalaciones terapéuticas ya son populares entre los argelinos que buscan sus beneficios para la salud; de hecho, los romanos, las tribus bereberes y los sultanes otomanos las han buscado durante milenios.
Elija entre las casi 300 fuentes termales de Argelia
En Argelia hay 282 fuentes termales, según un estudio de 2015 repartidas por 40 wilayas (estados) del país. Alrededor de dos tercios son manantiales naturales y el resto son perforaciones. Alrededor de la mitad de las fuentes termales de Argelia se concentran en el norte del país, mientras que 93 se encuentran en el noreste.
También hay 82 fuentes termales en el sur del país. El hammam de Maskhoutine, en la provincia de Guelma, es uno de los lugares más populares, que atrae a visitantes desde la época romana. Es famoso por sus monumentales paredes de travertino y sus aguas ricas en minerales. En el Hammam Essalihine, en la provincia nororiental de Khenchela, los visitantes se bañan rodeados de ruinas romanas de 2.000 años de antigüedad.
Balnearios y hammams en Argelia
Junto a las fuentes termales naturales de Argelia, cada vez hay más balnearios y hammams. Hay 35 balnearios en el país, ocho en el sector público y 27 en el privado.
La mayoría incluyen instalaciones de alojamiento como hoteles y bungalows, con una capacidad total de unas 4.300 camas. Además, hay unos 40 baños tradicionales, conocidos como hammams, que también ofrecen alojamiento a los visitantes.
Los beneficios curativos de las aguas termales
Al agua termal se le atribuyen múltiples beneficios para la salud gracias a su composición química de minerales terapéuticos. En Argelia, los manantiales naturales se utilizan para tratar el reumatismo, las afecciones respiratorias y dermatológicas, así como las dolencias gástricas, intestinales y biliares.
El azufre, presente en las aguas de Hammam Maskhoutine, por ejemplo, se considera beneficioso para las afecciones cutáneas, mientras que el magnesio ayuda a aliviar el estrés y a relajarse.
Los balnearios y manantiales del país ya son populares entre las personas mayores que buscan curas. Algunos empleados de empresas también reciben viajes a balnearios como prestación sanitaria. Muchos otros argelinos vienen a pasar el día, sobre todo en familia, y aprovechan las atracciones cercanas, como los paisajes naturales o las zonas de picnic.