La Flotilla Global Sumud parte desde Barcelona hacia Gaza para establecer un corredor humanitario

La Flotilla Global Sumud cuenta con el respaldo de figuras prominentes del activismo internacional y el mundo del espectáculo. Entre los tripulantes de la conocida popularmente como la flotilla de Gaza se encuentra la activista climática sueca Greta Thunberg, quien ha expresado que "poco a poco cada día la gente está despertando ante este genocidio" y critica el silencio mundial ante el incumplimiento de la ley internacional por parte de Israel. También participa el actor irlandés Liam Cunningham, conocido por su papel en la serie 'Juegos de Tronos'.

La exalcaldesa de Barcelona, Ada Colau, presente en el acto de despedida, destacó el compromiso histórico de la ciudad con la causa palestina, recordando que Barcelona fue "la primera ciudad de Europa en romper relaciones institucionales con Israel". El actor Eduard Fernández también mostró su apoyo, describiendo cada barco como "un grito de dignidad" y denunciando que "el agua se convierte en tumba cuando los derechos son negados". España fue uno de los primeros países en reconocer el Estado de Palestina, en mayo de 2024.

En Génova, cuarenta mil personas participaron el sábado en una marcha con antorchas desde la sede de Music for Peace hasta el Puerto Antiguo para acompañar a la flotilla con alimentos destinados a Gaza. La asociación italiana ha logrado recoger más de 300 toneladas de ayuda humanitaria que será transportada hacia la Franja en los próximos días.

La alcaldesa de Génova, Silvia Salis, participó en la marcha declarando estar "orgullosa de ser la alcaldesa de esta ciudad, pero esta noche aún más". El Movimiento 5 Estrellas anunció una donación de un millón de euros a Music for Peace, mientras que representantes del Partido Democrático y de Alianza Verdes Izquierda han mostrado su apoyo y solicitado al Gobierno de Giorgia Meloni que garantice protección a los ciudadanos italianos que se dirigen hacia Gaza.

Desde Portugal, la participación en la flotilla ha generado controversia política. La diputada y coordinadora del Bloque de Izquierda, Mariana Mortágua, junto al activista Miguel Duarte y la actriz Sofia Aparício, forman parte de la tripulación portuguesa.

Mortágua esperaba que su inmunidad parlamentaria pudiera ser útil para la misión, pero el ministro de Asuntos Exteriores portugués, Paulo Rangel, aclaró que "la inmunidad parlamentar no otorga inmunidad diplomática" y que el Gobierno português "no tiene obligación de acompañar y proteger" la flotilla bajo el derecho internacional. A pesar de esto, Rangel confirmó que todos los ciudadanos portugueses, incluidos los tres participantes, gozarán de la protección consular correspondiente.

Objetivos y denuncia de la situación en Gaza

Saif Abukeshek, organizador de la flotilla, ha explicado que la misión busca establecer un corredor humanitario hacia Gaza, donde ya han muerto más de 63.000 personas, muchas de ellas menores. Según su testimonio, la falta de agua, luz y comida en el territorio palestino "es intencionado", al igual que los bombardeos contra hospitales y escuelas.

La activista alemana de Derechos Humanos, Yasemin Acar, denunció que "los periodistas están siendo asesinados en Gaza" y que "muchos países están colaborando con este genocidio". La flotilla se presenta como una "decisión estratégica" de movilización, donde "la esperanza es la resistencia de los palestinos", según palabras de Abukeshek.

Respaldo gubernamental y antecedentes

La iniciativa cuenta con el apoyo del ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, quien aseguró que España desplegará "toda la protección necesaria" para los tripulantes españoles. El ministro recordó que el Gobierno español lleva "meses solicitando que todos los trabajadores humanitarios puedan entrar libremente en Gaza" y garantizó el mismo nivel de protección consular ofrecido a flotillas anteriores.

Sin embargo, la misión enfrenta precedentes preocupantes. En ocasiones anteriores, comandos del Ejército israelí han interceptado otras flotillas que intentaban alcanzar las costas de Gaza, como la flotilla La Libertad.

Las fuerzas israelíes han "desarmado" embarcaciones de forma violenta y requisado material sanitario y alimentos destinados a la población civil. A pesar de estos riesgos, los organizadores mantienen su determinación: "No sabemos qué va a pasar, pero tenemos muy claro que vamos a volver a organizarnos".

Tardarán una semana en llegar a la franja de Gaza

Los barcos ya han partido de Barcelona y se unirán barcos durante la travesía hasta el 4 de septiembre que se unirán los que parten de Túnez. En total más de 50 barcos de 44 países distintos forman la Flotilla Global Sumud.

Los voluntarios ya cargaron los barcos en Barcelona con comida, medicamentos y material de ayuda. Ya han dejado el puerto rumbo a Gaza. Solo el tiempo dirá si en esta ocasión Israel vuelve a detener el paso a esta misión humanitaria.