La Policía de Ámsterdam detiene a decenas de personas que se manifestaban durante las prohibiciones
La alcaldesa de Ámsterdam, Femke Halsema, prohibió todas las manifestaciones del fin de semana tras los actos de violencia antisemita contra seguidores de un club de fútbol israelí. La medida se adoptó después de que el jueves y el viernes jóvenes en patinete y a pie atacaran a seguidores del Maccabi de Tel Aviv, en lo que fue ampliamente condenado como un violento brote de antisemitismo.
A última hora de la tarde del domingo, el ayuntamiento, junto con la Policía y la fiscalía de Ámsterdam, prorrogó la prohibición de manifestaciones hasta el próximo jueves por la mañana. El embajador de Israel en los Países Bajos dijo que 2.000 israelíes fueron trasladados a casa en vuelos especiales desde Ámsterdam en los últimos días.
Antes del partido contra el Ajax, los seguidores del Maccabi arrancaron una bandera palestina de un edificio de Ámsterdam y corearon consignas antiárabes de camino al estadio. También hubo noticias de peleas entre hinchas del Maccabi.
El periódico de Ámsterdam 'Het Parool' informó de que se había detenido a unas 100 personas, y los medios de comunicación dijeron que se las habían llevado en autobuses. La Policía confirmó que estaba deteniendo a manifestantes, pero no dio cifras. Los manifestantes gritaban consignas como "Palestina libre, libre".
El Ayuntamiento de Ámsterdam dijo en X que la Policía había empezado a detener a los manifestantes que se negaban a abandonar la plaza, situada en el corazón de la zona comercial del centro de la ciudad y cerca de la histórica red de canales.
Los organizadores de la protesta acudieron a los tribunales el domingo por la mañana en busca de una orden judicial que permitiera la manifestación, pero un juez mantuvo la prohibición impuesta por el ayuntamiento.
En la vista, Olivier Dutilh, alto cargo de la Policía de Ámsterdam, declaró que durante la noche se habían vuelto a producir incidentes contra personas que se creía que eran judías: a algunas se les ordenó que se bajaran de los taxis y a otras se les pidió que presentaran sus pasaportes para confirmar su nacionalidad.
La Policía puso en marcha el viernes una investigación a gran escala después de que bandas de jóvenes llevaran a cabo lo que el alcalde de Ámsterdam calificó de ataques "de atropello y fuga" contra aficionados, aparentemente inspirados por llamamientos en las redes sociales a atacar a personas judías. Cinco personas fueron atendidas en hospitales y se detuvo a más de 60 sospechosos.
El ministro israelí de Asuntos Exteriores, Gideon Saar, se desplazó a Holanda el viernes y ofreció la ayuda de Israel en la investigación policial. Se reunió el sábado con el primer ministro holandés, Dick Schoof, y dijo en un comunicado que los ataques y las exigencias de mostrar los pasaportes "recordaban a períodos oscuros de la historia". Schoof canceló su viaje a COP29 para solucionar este conflicto.
El siguiente partido de Israel será en Francia y habrá un gran despliegue de seguridad
En Francia, la Policía de París dijo el domingo que 4.000 agentes y 1.600 empleados del estadio se desplegarán para un partido de fútbol Francia-Israel el jueves para garantizar la seguridad en y alrededor del estadio y en el transporte público.
"Hay un contexto, tensiones que hacen de ese partido un evento de alto riesgo para nosotros", dijo el jefe de la Policía de París, Laurent Nuñez, en la cadena de noticias francesa 'BFM TV', añadiendo que las autoridades "no tolerarán" ningún tipo de violencia.
Nuñez dijo que 2.500 agentes de Policía serían desplegados alrededor del estadio Stade de France, al norte de la capital francesa, además de otros 1.500 en París y en el transporte público.
"Habrá un perímetro de seguridad antiterrorista alrededor del estadio", dijo Núñez. Los controles de seguridad serán "reforzados", añadió, incluso con cacheos sistemáticos y registros de bolsos. Núñez señaló que los organizadores franceses han estado en contacto con las autoridades y las fuerzas de seguridad israelíes para preparar el partido.