Trump nombrará a Rubio y Waltz como jefes de Política Exterior, según varios informes
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha optado por nombrar a Marco Rubio y Mike Waltz como secretario de Estado y asesor de Seguridad Nacional, según informes preliminares que también sugieren que el presidente electo aún podría cambiar de opinión en el último minuto. Sin embargo, ambas elecciones son indicativas de las prioridades de Trump en Política Exterior, ya que han presionado para que EE.UU. mire hacia dentro y han criticado que los países europeos no gasten lo suficiente en Defensa, especialmente en el contexto de la alianza de la OTAN.
Por un lado, Rubio defendió que los países europeos deberían "tomar la iniciativa" en materia de Defensa en el continente. "Alemania, Francia y el Reino Unido son más que capaces de gestionar su relación con el beligerante nuclear situado al este", escribió Rubio en 'American Conservative' el año pasado. Por lo demás, ha promovido un enfoque de línea dura hacia Irán, China y Cuba. Cuando se trata de Pekín, Rubio ha abogado por un mayor escrutinio de la influencia de Pekín en la tecnología estadounidense, pidiendo al Departamento del Tesoro que inicie una revisión en Seguridad Nacional sobre la aplicación de medios sociales chinos TikTok en 2019.
Rubio calificó a China como "el adversario más poderoso al que Estados Unidos se ha enfrentado en la memoria viva" en un informe redactado en septiembre. China, por su parte, sancionó a Rubio el año pasado. Sobre Ucrania, ha dicho que, aunque apoya al país que sigue luchando contra la invasión a gran escala de Rusia, el actual conflicto entre Moscú y Kiev debe llegar a una "conclusión". En cuanto a la crisis de Oriente Medio, Rubio ha apoyado firmemente a Israel, calificando a los militantes de Hamás de "animales viciosos" y acusando de subordinación a los funcionarios estadounidenses que apoyaron un alto el fuego en Gaza, lo que indica que también promovería un enfoque de línea dura en la región.
En abril, Rubio votó en contra de un proyecto de ley de ayuda de 95.000 millones de dólares (89.400 millones de euros) para Israel, Ucrania y Taiwán, que fue aprobado por abrumadora mayoría en el Senado a pesar de su resistencia. Rubio argumentó que, aunque en principio apoyaba la ayuda, no apoyaría el proyecto de ley debido a que EE.UU. no estaba haciendo lo suficiente para combatir los problemas internos, como invertir en seguridad fronteriza, señalando su apoyo, al igual que Trump, a que EE.UU. se aísle aún más. Recientemente ha apoyado en gran medida las opiniones de Trump sobre la OTAN, copatrocinando legislación que haría más difícil que el expresidente se retirara de la alianza durante su primer mandato.
Waltz, en Seguridad Nacional
El otro candidato elegido por Trump, el congresista republicano Mike Waltz, también se ha mostrado duro con China y escéptico sobre el cumplimiento de los objetivos de Defensa de la OTAN por parte de los aliados europeos. Waltz calificó de "patético" que menos de la mitad de los aliados de la OTAN cumplieran sus objetivos de gasto en Defensa y, al igual que el presidente electo, ha cuestionado la naturaleza indefinida del apoyo estadounidense a Ucrania. En abril, Waltz afirmó que una "tiranía de las bajas expectativas" había infectado a la OTAN y se preguntó abiertamente si era sostenible que Estados Unidos proporcionara la mayor parte de las armas.
Sobre Ucrania, Waltz apoyó anteriormente a Biden en el suministro de armas al país en guerra, pero ha adoptado cada vez más el enfoque de Trump y ha cuestionado por qué otros países no están haciendo lo suficiente para contrarrestar a Rusia y reforzar sus propias defensas. Considera a China como uno de los mayores ganadores en el extranjero y advierte a Estados Unidos de que debe estar preparado para la guerra en la región. El oficial retirado de las Fuerzas Especiales también ha abogado anteriormente por un mayor compromiso militar estadounidense en Afganistán y, tras haber estado desplegado en el país en varias ocasiones, se mostró muy crítico con la retirada de Kabul del actual presidente Joe Biden.