La huelga general en Portugal reaviva el recuerdo del periodo de la troika

El Gobierno portugués se enfrenta este jueves a una huelga general, una protesta que estará marcada por movilizaciones en la calle contra la revisión de la legislación laboral y que volverá a unir a los sindicatos CGTP y UGT en una huelga conjunta por primera vez en 12 años.

El proyecto de reforma laboral presentado por el Ejecutivo de Luís Montenegro y actualmente en debate en la concertación social ha motivado la convocatoria de la undécima huelga general en Portugal en 51 años de democracia. Será la quinta ocasión en la que CGTP y UGT convergen en una protesta de este tipo, algo que no ocurría desde la huelga conjunta del 27 de junio de 2013.

La última huelga general se produjo durante el periodo de la llamada 'troika', cuando la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional supervisaron las condiciones del rescate financiero de Portugal durante la crisis económica. En aquel momento, el préstamo concedido al país estuvo condicionado a la aplicación de un severo plan de austeridad económica y social, orientado a reducir el déficit presupuestario y restaurar la confianza de los mercados financieros.

Los sindicatos consideran que la reforma actualmente en discusión supone un debilitamiento de protecciones laborales fundamentales, desde las normas sobre despido hasta la recuperación del banco de horas individual.

"¿Quién estaba en el Gobierno en 2012? Son exactamente los mismos protagonistas que hoy impulsan esta revisión de la legislación laboral. Cambia el argumento, pero el objetivo es el mismo. En 2012 usaron el pretexto de la troika para recortar derechos. Hoy, en pleno empleo y con una economía que el propio Gobierno dice que crece, utilizan el discurso de la productividad y la modernización. ¿Para hacer qué? Exactamente lo mismo: quitar derechos, aumentar la precariedad, desregular la jornada laboral, atacar el derecho de huelga y facilitar los despidos. Está todo dicho", denunció Tiago Oliveira, secretario general de la CGTP.

Muchos trabajadores evocan paralelismos con aquel periodo. Algunos, como Nuno Costa, trabajador de higiene urbana en Lisboa, consideran que las reformas actuales suponen un regreso a las políticas de entonces. "Veo que los derechos de los trabajadores vuelven a ser atacados de forma muy agresiva. Las intenciones que se plantearon durante la época de la troika reaparecen ahora en este paquete laboral", afirmó.

El Ejecutivo, por su parte, ha reiterado que "no está dispuesto a retirar toda la propuesta" y que pretende mantener sus "pilares fundamentales", aunque se muestra abierto al diálogo. La ministra de Trabajo, Rosário Palma Ramalho, ya ha advertido de que no prolongará las negociaciones en el diálogo social y que, con o sin acuerdo, los cambios deberán debatirse y votarse en el Parlamento.

¿Qué movilizaciones están previstas?

La CGTP ha convocado diversas acciones en 15 distritos del país, de norte a sur, así como en las regiones autónomas de Azores y Madeira. Las protestas incluirán concentraciones, manifestaciones y piquetes de huelga. La UGT, por su parte, ha anunciado que acompañará la movilización en varios de esos piquetes.

En el transporte público, los trenes, los barcos y los autobuses de Carris en Lisboa funcionarán con servicios mínimos durante la jornada de huelga, mientras que el Metropolitano de Lisboa no prestará servicio. En el ámbito sanitario, los servicios mínimos cubrirán las urgencias, la quimioterapia, los cuidados paliativos y las curas.

Los colegios, los servicios de recogida de basuras y otros servicios públicos también podrían verse afectados por una segunda jornada de huelga prevista para el 12 de diciembre. Algunos sindicatos de la función pública han convocado un nuevo paro un día después de la huelga general del 11 de diciembre, lo que podría provocar nuevas alteraciones en el funcionamiento de la Administración.

Además, el Sindicato Democrático de Enfermeros de Portugal (Sindepor) ha anunciado una huelga nacional de enfermeros para el próximo viernes, de 16 horas de duración, entre las 8:00 y las 24:00. El sindicato protesta contra la reforma laboral y reclama avances en la negociación del convenio colectivo, estancada desde hace meses.

A esta convocatoria se suma el Sindicato Independiente de Trabajadores de los Organismos Públicos y de Apoyo Social (Sitopas), que ha llamado a la huelga el 12 de diciembre a los trabajadores de la Administración Pública central, regional y local que se encuentren en carreras general, especial o subsistente.

Las movilizaciones podrían afectar a múltiples servicios públicos, como escuelas, oficinas de Hacienda, servicios de la Seguridad Social y servicios municipales, incluida la recogida de basuras. Muchos centros educativos ya han avisado a las familias de que podrían permanecer cerrados no solo el jueves, sino también el viernes.