El Papa Francisco sigue hospitalizado pero se encuentra de buen humor, según Giorgia Meloni

La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, visitó este miércoles al Papa Francisco en el hospital, e informó de que se encontraba "alerta y receptivo" a pesar de su continua batalla contra la neumonía y una grave infección bronquial que le han mantenido hospitalizado durante casi una semana.

Meloni, que describió el encuentro como cálido y desenfadado, señaló que le trasladó buenos deseos en nombre del Gobierno italiano y de la nación. "Bromeamos como siempre. No ha perdido su proverbial sentido del humor", declaró la oficina de la primera ministra.

Se trata del primer encuentro confirmado con un representante público desde que el Papa, de 88 años, fue ingresado el viernes en el hospital Gemelli de Roma. Hasta ahora, solo le habían visto sus ayudantes personales y su equipo médico.

El Vaticano indicó en su último comunicado que el estado general de salud de Francisco se mantiene estable, aunque los análisis de sangre mostraron una "ligera mejoría" en los principales índices de inflamación. Francisco también trabajó por la tarde con sus colaboradores, según la Santa Sede. Las pruebas realizadas el martes habían confirmado que está luchando contra una neumonía en ambos pulmones, además de una bronquitis asmática.

Los peregrinos rezan por su recuperación en la Plaza de San Pedro

Los peregrinos que habían planeado asistir a la audiencia general semanal del Papa, que fue cancelada, se reunieron en la Plaza de San Pedro para rezar por su recuperación. "Creo que mucha gente está decepcionada, pero lo más importante es que tenemos que rezar por su salud", dijo la hermana Charlene, una monja de Singapur que se encontraba entre los peregrinos.

Francisco fue ingresado en el hospital tras agravarse su bronquitis. Los análisis confirmaron más tarde una infección respiratoria polimicrobiana, lo que indica que una combinación de bacterias y virus se había infiltrado en su sistema respiratorio.

A última hora del martes, una tomografía computarizada reveló que sufría una neumonía bilateral, es decir, que ambos pulmones estaban afectados. "El Papa Francisco es un hombre fuerte que no se deja abatir por las dificultades", declaró el reverendo Enzo Fortunato, responsable de una comisión vaticana sobre la infancia.

Preocupación por los plazos de recuperación y los riesgos

El Vaticano no ha facilitado información actualizada sobre cómo está respondiendo Francisco al tratamiento, pero ha confirmado que no tiene fiebre. A su edad y con una movilidad limitada, sigue habiendo riesgo de complicaciones.

La doctora Meredith McCormack, especialista pulmonar de la Universidad Johns Hopkins, dijo que el progreso del Papa Francisco dependerá de su respuesta a la terapia, que puede incluir fisioterapia para eliminar el líquido de sus pulmones.

"La falta de empeoramiento sería un signo alentador", dijo McCormack, que no está involucrada en su tratamiento. Aunque la recuperación normal de una neumonía lleva de una a dos semanas, los pacientes en edad avanzada suelen necesitar más tiempo.

El Vaticano no ha indicado cuánto tiempo permanecerá ingresado el Papa Francisco, limitándose a señalar que el tratamiento de un "cuadro clínico tan complejo" requerirá una estancia "adecuada".

A pesar de la ausencia del Papa, los simpatizantes siguen enviándole mensajes de apoyo. Mientras tanto, las peregrinaciones del Año Santo siguen en marcha en el Vaticano, con grupos de fieles pasando por la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro el miércoles.