El debate pendiente sobre la prórroga nuclear

El debate sobre la extensión de la vida útil de las nucleares, empezando por la de Almaraz, cuyo primer reactor tiene previsto cerrar en 2027, llegó ayer al Congreso. Pero la sesión no sirvió para profundizar en un debate necesario ni tuvo consecuencias sobre los planes (poco claros) del Gobierno al respecto. La Cámara baja rechazó la enmienda en la Ley de Movilidad Sostenible, introducida por el PP en el Senado, que implicaba derogar las órdenes de cierre que afectan a Almaraz, Ascó I y Cofrentes. La abstención de Junts frustró la iniciativa, que habría tenido escasa repercusión práctica, pero habría lanzado un mensaje político contundente, en un momento en que las eléctricas que operan Almaraz han solicitado una extensión de tres años. No unieron sus votos las derechas, a pesar de la presión que el sector eléctrico y la patronal catalana Foment ejercieron sobre el partido de Puigdemont, y a pesar de la decisión de este último de romper todo apoyo al Ejecutivo.