Borrell afirma que las fuerzas de paz de la FINUL cuentan con el "firme apoyo" de la UE
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, ha afirmado que las fuerzas de paz de la ONU destacadas en el sur del Líbano cuentan con el "firme apoyo" del bloque tras reunirse con su comandante en Beirut.
Borrell mantuvo conversaciones con el jefe de la misión y comandante de la FINUL, Aroldo Lázaro, durante su visita a la capital libanesa el domingo. Esta reunión se produce días después de que cuatro soldados italianos resultaran heridos tras la explosión de dos cohetes contra una base de la FINUL en Shama, disparados por Hezbolá o uno de sus grupos afiliados.
"Los ataques contra la FINUL son completamente inaceptables", afirmó Borrell en un comunicado tras su reunión con Lázaro. "La FINUL está desempeñando un papel clave en un entorno cada vez más difícil. Hay más de 10.000 hombres y mujeres desplegados en el sur. Treinta de ellos han resultado heridos".
Varios puestos de la FINUL han sido alcanzados desde que Israel comenzó su invasión terrestre del Líbano el 1 de octubre, dejando heridos a algunos miembros de las fuerzas de paz.
Borrell también expresó su apoyo a la agencia de ayuda de la ONU para los refugiados palestinos, afirmando que desempeña un "papel insustituible en Gaza, pero también aquí en Líbano."
"Los servicios que la UNRWA presta a medio millón de refugiados palestinos no pueden ser suministrados por nadie más. Y condenamos la ley aprobada por la Knesset israelí, y seguimos instando al Gobierno israelí a que no aplique esta decisión". Se refería a las leyes aprobadas por el Parlamento de Israel a finales de octubre que prohíben a la UNRWA operar en territorio israelí.
Israel lleva mucho tiempo enfrentado a la UNRWA, a la que acusa de hacer la vista gorda ante la presencia de miembros de Hamás entre su personal y de permitir que el grupo militante utilice sus edificios como bases. La UNRWA ha negado repetidamente estas acusaciones.
Continúan los ataques en Beirut
Mientras tanto, Israel continuó sus ataques aéreos sobre Beirut hasta el domingo por la noche, después de que Hezbolá disparara unos 250 cohetes y otros proyectiles contra Israel, hiriendo a siete personas en uno de los ataques más intensos del grupo militante en meses.
Los ataques del domingo en el norte y centro de Israel se produjeron en respuesta a los mortíferos ataques israelíes del sábado en el centro de Beirut. Mientras tanto, los negociadores prosiguen con sus esfuerzos de alto el fuego para detener la guerra total.
Y el Ejército libanés afirma que un ataque israelí contra un centro del ejército libanés en el suroeste del país mató a un soldado e hirió a otros 18. El Ejército israelí ha expresado su pesar y ha afirmado que sus operaciones se dirigen exclusivamente contra los militantes.
El grupo Hezbolá está ideológicamente alineado con Hamás, que tiene su base en Gaza, y comenzó a disparar contra Israel al día siguiente del inicio de la guerra en la Franja, en octubre del año pasado.
Hezbolá e Israel han intercambiado disparos casi a diario, provocando el desplazamiento de decenas de miles de personas a ambos lados de la frontera. El 1 de octubre, el Ejército israelí lanzó una operación terrestre en Líbano en la que se cree que hay 15.000 soldados de las FDI en el país.
Los ataques israelíes han dejado más de 3.500 muertos en el país, según el Ministerio de Sanidad libanés. Y los combates han desplazado a cerca de 1,2 millones de personas, una cuarta parte de la población del país. Por parte israelí, unos 90 soldados y casi 50 civiles han muerto en bombardeos en el norte de Israel y en los combates.
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