Nvidia no aguanta la presión y cede un 3% mientras los analistas ajustan sus valoraciones
Con unas valoraciones tan exigentes cumplir con el guion ya no es suficiente. Superada la euforia de los primeros minutos, los inversores analizan con lupa las cifras dadas a conocer por Nvidia. Aunque la compañía sigue creciendo, el ritmo de expansión se ralentiza y los márgenes empiezan a inquietar a los analistas. La empresa de moda en los mercados cede un 3% y sus acciones se alejan los 150 dólares que tocó en la apertura. La dirección de la compañía confía en que los nuevos productos le permitan mantener el crecimiento mientras las firmas de análisis actualizan sus valoraciones. El día después de hacer públicas las cuentas del tercer trimestre hasta 16 casas de análisis revisan al alza el precio objetivo, mientras otras cinco lo reiteran y solo HSBC la baja. Nvidia pelea por sacudirse las pérdidas y prolongar el rally en una jornada la que las preocupaciones geopolíticas vuelven a primera línea.
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