Las promotoras riegan a sus grandes accionistas con 1.400 millones en dividendos ante la incapacidad de vender las compañías
Los grandes fondos internacionales dueños de las mayores promotoras de vivienda en España llevan años intentando realizar alguna operación corporativa para salir del accionariado. Ante la incapacidad para lograrlo (sobre todo por el descuento en Bolsa con el que cotizan las tres principales), han puesto en marcha el plan B. La fórmula para remunerar a sus dueños ha pasado por repartir dividendos muy por encima de lo que corresponde por beneficios, a través del reparto de capital con cargo a reservas de la compañía, reduciendo capital o amortizando autocartera. Esta vía tiene como contrapartida reducir la capacidad de inversión y de crecimiento de las propias empresas, que están convirtiéndose en algunos casos en gestoras del negocio del ladrillo para otros inversores.
Today