A los evangelistas del café de especialidad les salen las cuentas: por qué estos locales han conquistado las ciudades españolas
Algo menos de una decena de personas hacen cola delante de la barra del Baburu Café un sábado por la mañana, y Óscar Alonso, el dueño, y su compañero se afanan en atenderlas. En cuanto despachan un pedido, un nuevo cliente se suma a la espera. “Yo creo que podría haber en Zamora dos o tres más, tranquilamente”, asegura sobre las cafeterías de café de especialidad como la suya, ya superados esos frenéticos minutos que, dice, no son lo habitual. “A lo mejor las abro yo”, comenta animado. Su local, el único en la ciudad de estas características, es una de las gotas de la ola que ha inundado las calles, sobre todo de las principales ciudades, en los últimos años. El sector, en general, aún ve margen para crecer, aunque también augura cierta corrección en un segmento en el que ya no solo se fijan pequeños emprendedores y amantes de este grano.