Voto de confianza en Francia: Bayrou plantea optar entre el "caos" y la "responsabilidad"

Elegir entre "caos y responsabilidad". Tras dar la sorpresa anunciando que el 8 de septiembre su Gobierno rendirá cuentas ante la Asamblea Nacional, el primer ministro François Bayrou defendió este martes, en la universidad de verano de la CFDT en Boissy-la-Rivière (Essonne), su proyecto de presupuesto para 2026, y pidió a la oposición que "reflexione".

"En los próximos 13 días, los franceses elegirán, influirán en sus representantes, para que elijan y digan si están del lado del caos o de la responsabilidad", declaró, refiriéndose a "un momento de clarificación y de verdad". A mediados de julio, el jefe del Gobierno había anunciado su intención de ahorrar cerca de 44.000 millones de euros para contener la amenaza de sobreendeudamiento de Francia. Cerca de la mitad de estos ahorros se basarían en el "control del gasto público". François Bayrou advirtió de que "el peso de la deuda, con el que ahora cargamos a los franceses trabajadores y a las generaciones futuras, aplastará las iniciativas y, combinado con el colapso demográfico, pondrá en peligro el contrato social del país".

"Un esfuerzo específico" exigido a las rentas más altas

François Bayrou se mostró dispuesto a pedir un "esfuerzo específico" a las rentas más altas, prometiendo abordar la fiscalidad de los más ricos. "Se suprimirán los nichos fiscales para los más ricos y las grandes empresas, que se consideran injustos", anunció, afirmando que "benefician principalmente a los hogares acomodados y a las grandes empresas".

Devolver la gestión de la protección social a los interlocutores sociales

El primer ministro también propuso devolver la gestión de la protección social, en particular de las pensiones complementarias, a los interlocutores sociales. "Propongo que cambiemos de rumbo" y que les confiemos "la gestión de los principales pilares del sistema de protección social, en particular el seguro de desempleo y de vejez", declaró.

El lunes, tras el anuncio del voto de confianza, todos los partidos de la oposición confirmaron que no apoyarían al Gobierno. Sólo los Republicanos (LR) indicaron que se pondrían del lado del bloque presidencial. El reparto de votos anunciado condena al primer ministro a una caída casi segura. En declaraciones recogidas anteriormente por 'L'Express', François Bayrou afirmó que "lucharía como un demonio" para defender su plan presupuestario.