Un Ferrari incautado por la Policía de Portugal se une a su flota de vehículos de lujo

El parque automovilístico de la Policía de Seguridad Pública portuguesa (PSP) ha vuelto a crecer. La última adquisición es un Ferrari 488 GTB, que entró en servicio el mes pasado y se une a otros deportivos incautados en procedimientos judiciales o administrativos y entregados a las Fuerzas de Seguridad.

Es la primera vez que la PSP dispone de un vehículo de Ferrari. Bastaron unas luciérnagas, pegatinas reflectantes, un sistema de comunicación y algunos detalles más para convertir este deportivo en un coche con los colores del PSP.

Este nuevo y lujoso vehículo del PSP no se compró, y no se adquirió como parte del programa de 34 millones de euros lanzado por el Gobierno en 2023. El coche en cuestión fue devuelto al Estado en virtud de un proceso judicial.

Según 'Jornal de Notícias', que cita una fuente de la Dirección Nacional (DN) de la PSP, el Ferrari 488 GTB, valorado en unos 240.000 euros, fue incautado en el marco de un caso de tráfico de drogas.

Equipado con un motor V8 biturbo de 3,9 litros, tiene 670 CV y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en sólo 3 segundos y alcanzar los 200 km/h en 8,3 segundos, con una velocidad máxima de 330 km/h.

Entre sus funciones, este Ferrari y otros vehículos de la flota de la PSP con características excepcionales se reservan para el transporte urgente de órganos humanos para trasplantes, la vigilancia de la visibilidad en acciones preventivas, la exhibición en ferias y eventos y el acompañamiento de organizaciones de alto nivel.

Este no es el único deportivo al servicio de las fuerzas policiales. La PSP también cuenta con otros modelos de altas prestaciones: un Ford Mustang GT, fruto de un proceso de importación ilegal y en servicio desde mayo de 2023; un BMW i8 incautado a un traficante; un Porsche 911 Carrera que procede de un caso de fraude; un Audi R8 vinculado al narcotráfico y un Subaru Impreza que acabó en manos de los policías de la extinta Dirección General de Tráfico.

La Guardia Nacional Republicana (GNR) tampoco se queda atrás: entre 2021 y 2024 integró 24 vehículos de altas prestaciones, entre ellos un Nissan GT-R -ya utilizado para el transporte urgente de órganos- y varios modelos de Porsche (911 Carrera Cabrio, Panamera y Taycan).

La asignación de estos coches de alto rendimiento está gestionada por la Oficina de Administración de Bienes (GAB), la entidad responsable de preservar y disponer de los bienes incautados en casos penales, como vehículos, propiedades o dinero. El objetivo es evitar la pérdida o devaluación de estos bienes: pueden venderse, destruirse o, en su caso, darles un uso público.