Portugal vuelve a ir a elecciones anticipadas el 18 de mayo

Portugal volverá a celebrar elecciones el 18 de mayo, según anunció el presidente de la República en una declaración a la nación este jueves por la noche, tras la reunión del Consejo de Estado que tuvo lugar esta tarde en el Palacio de Belém. Marcelo Rebelo de Sousa disolverá la Asamblea de la República y convocará elecciones anticipadas.
Esta será la tercera disolución del Parlamento en el mandato presidencial de Marcelo Rebelo de Sousa. Aunque la mayoría de los partidos se mostraron favorables a la primera fecha, el presidente de la República fue sensible a varios argumentos, entre ellos el hecho de que el día 11 habrá muchos peregrinos camino de Fátima y el partido de fútbol entre el Benfica y el Sporting, que podría ser decisivo para determinar quién gana el campeonato.
En un discurso de 10 minutos, el jefe del Estado comenzó advirtiendo de que "el mundo ha cambiado inmensamente en los últimos meses" y "cambiará más". " Estados Unidos parece distanciarse de sus aliados europeos, la Unión Europea debe unirse aún más" y "evitar quedar desechable o debilitada entre Estados Unidos y Rusia".
"Portugal ha sido capaz de equilibrar sus cuentas, reducir su deuda externa, atraer nuevos proyectos, mejorar sus calificaciones con las agencias financieras", elogió. Marcelo lanzó entonces una pregunta: "¿Por qué el Gobierno anunció y presentó la moción de confianza y la oposición la rechazó?".
En el centro del problema, dijo, estaba la confianza que merecía el Gobierno para seguir gobernando. Por un lado, el Gobierno decía que el primer ministro siempre había respetado la ley y la ética, mientras que por otro, la oposición decía que podría haber habido una falta de respeto a estos principios.
El Gobierno, dijo Marcelo, entendía que prolongar este"choque de juicios" haría "imposible seguir gobernando", por lo que era "imprescindible" que hablara el Parlamento y, después, si era necesario, el pueblo.
"Este choque, no sólo jurídico o político, sino sobre todo de juicios éticos y morales sobre una persona y su honorabilidad, planteó una nueva cuestión: todos los esfuerzos para llegar a un acuerdo, aunque fuera mínimo, resultaron imposibles", resumió.
Subrayando que "el acuerdo era imposible", el Presidente de la República señaló que los partidos se habían alineado para pedir elecciones anticipadas. "La misma fue la opinión unánime del Consejo de Estado, que no lo deseaba, pero tuvo que aceptar la salida debido a la realidad", reconoció.
Ante estas cuartas elecciones en cinco años, que "nadie esperaba ni quería", ahora habrá dos meses de debate, dijo Marcelo, considerando que es "inevitable" que el tema de la crisis forme parte de este debate.
Aún así, es importante que los partidos presenten propuestas sobre la vida de los portugueses, la economía, el empleo, el control de la inflación, los salarios, la sanidad, la educación, la vivienda y la justicia, dijo. Todo ello en el marco de una situación internacional difícil, subrayó. El jefe del Estado también expresó su deseo de que la transición sea "si es posible tan pacífica como la vivida en 2024", a pesar de que hay menos meses entre la caída del Gobierno y las elecciones anticipadas.
Lo que hace falta, dijo, no es sólo un debate "claro, frontal, esclarecedor, digno", sino también que "respete la diferencia y el pluralismo" y "no abra la puerta a experimentos que ya sabemos cómo empiezan y cómo acaban". En un mensaje final, el presidente de la República dijo que es importante que "el debate dé fuerza a quienes nos representarán en el Parlamento y gobernarán" y también "a la democracia". "Y con ella, su capacidad para afrontar y superar las crisis, que sólo tiene la democracia, no la dictadura", concluyó.
El presidente dijo a Montenegro que estaba en contra de la moción de confianza
La reunión del Consejo de Estado para analizar la crisis política tras la dimisión del Gobierno, que comenzó a las 15:10 con algunas ausencias en la mesa, finalizó a las 17:40. A la salida, como es tradición, ningún consejero hizo declaraciones sobre la reunión. Sin embargo, según informaciones de fuentes presentes en la reunión, citadas por varios medios de comunicación nacionales, el presidente habría dicho a los consejeros que no estaba de acuerdo con la estrategia del Gobierno de presentar una moción de confianza y que se preocupó de expresárselo al primer ministro antes de que se votara.
Los miembros del Consejo de Estado, por inherencia, son el Presidente de la Asamblea de la República, José Pedro Aguiar-Branco, el primer ministro, Luís Montenegro, el presidente del Tribunal Constitucional, José João Abrantes, la defensora del pueblo, Maria Lúcia Amaral, los presidentes de gobiernos regionales y expresidentes de la República. Este órgano consultivo del presidente incluye también cinco ciudadanos nombrados por el jefe del Estado y cinco elegidos por la Asamblea de la República.
Los actuales cinco miembros nombrados por el presidente de la República son Leonor Beleza, Lídia Jorge, Joana Carneiro, António Lobo Xavier y Luís Marques Mendes y los consejeros elegidos por el Parlamento para la actual legislatura son Francisco Pinto Balsemão y Carlos Moedas, nombrados por el PSD, Pedro Nuno Santos y Carlos César, por el PS, y André Ventura, por Chega.
El expresidente del PSD, Francisco Pinto Balsemão, el presidente del Gobierno regional de Madeira, Miguel Albuquerque, y la defensora del pueblo, Maria Lúcia Amaral, estuvieron ausentes de la reunión. El miércoles, el jefe del Estado recibió en el Palacio de Belém a los nueve partidos con escaños en la Asamblea de la República, que expresaron unánimemente su apoyo a la disolución del Parlamento y a la convocatoria de elecciones legislativas anticipadas.
El martes, el Parlamento rechazó una moción de confianza en el Gobierno, determinando la dimisión del Ejecutivo minoritario del PSD/CDS-PP, un año y un día después de la victoria de la coalición Alianza Democrática en las elecciones legislativas anticipadas del 10 de marzo de 2024.
La votación se produjo tras dos mociones de censura, a las que sobrevivió el primer ministro, solicitadas por Chega y el PCP a raíz de la polémica en torno a Luís Montenegro y la empresa de su familia, Spinumviva. El caso suscitó dudas sobre el cumplimiento del régimen de incompatibilidades e impedimentos para los titulares de cargos públicos y políticos.
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